La luz se hace amiga
de mi alma,
acaricia mi corazón,
cojo aire,
el mundo sigue su curso,
imparable,
me tiemblan
las emociones,
y albergo una tímida
esperanza de poder ser feliz.
El cielo sonríe,
el sol canta,
los gorriones alegres
entonan su canción,
y yo aunque cansada,
doy la bienvenida
a esta primavera extraña.