Vuelan mis tristezas
más allá del infinito,
perdidas en el espacio tiempo,
sus alas a veces parecen
mariposas,
se condensan mis tristezas
en una lluvia fina,
a veces más amable
a veces menos,
que caen gota a gota
como tinta a un poema,
un poema,
que antes de morir
da un suspiro
hacia el corazón de la vida.
Qué bonito poema, Amapola. Y qué bonito ese suspiro!!
ResponderEliminarBesicos muchos.
Deja que ese suspiro hacia el corazón de la vida se convierta en profunda inspiración y llene tus pulmones.
ResponderEliminarBesos.
Deja que vuelen, incluso que con sus alas te acaricien y con su fina lluvia te empapen, te secarás y un día las tristezas serán tus amigas , volaréis juntas y seréis lluvia fina y refrescante. Ya lo eres ; )
ResponderEliminarUn beso grAnde AMAPOLA
Volar es sentirse libre, no dejes nunca que ese derecho se nuble en ti.
ResponderEliminarUn beso fuerte, cuidate .
Son tristezas que generan tus bellos poemas y que hacen brillar tu noble corazón.
ResponderEliminarBesitos.
Eres única para dotar de belleza, con las palabras, a emociones tan tristes.
ResponderEliminarBesitos.
Te ha quedado radiante. Besos
ResponderEliminarVuelan los latidos...
ResponderEliminarAbrazo
hay que liberar las tristezas, como gotas de lluvia que se condensan y caen. no hay que dejar que se queden dentro.
ResponderEliminarbesos!!
Allá es donde debes estar, en el corazón de la vida, porque ese es tu lugar natural, de donde procedes, y adonde irás. Confía, Amapola...
ResponderEliminarUn enorme abrazo, querida amiga!!!
Si la poesía tiene el propósito humano de comunicar emociones, con estos versos tristes cayendo gota a gota, uno inevitablemente no puede dejar de conmoverse.
ResponderEliminarHermoso poema, Amapola.
Saludos.
Ariel
En la tristeza se encuentra belleza y poesía...
ResponderEliminarUn beso.
Poético... Ese viento.
ResponderEliminarAbrazos Amapola.