Desde mi oscuridad
persigo luciérnagas amables,
y una luz extraña
me responde
que tenga paciencia,
que los muros que atravieso
sólo son fantasmas en la
oscuridad,
y ésa luz cálida,
me señala
la mirada de un estrella
que se perdió
en el laberinto
que dejó
una ola en el mar
de mis pensamientos.
Siempre habrá una luz, a pesr de lo oscuro. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarPrecioso, siempre te quedará la mirada de las estrellas, llena de luz. Besos y un fuerte abrazo
ResponderEliminarQué lindo poema Amapola. Me gustaría leerte mucho más. Un beso, cielo.
ResponderEliminarPrecioso poema, Amapola. Siempre estará esa estrella a tu lado.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Es mi elemento y además una estrella.
ResponderEliminarBeso
un poema esperanzador. mencionas la paciencia, que es clave. siempre se encuentra la luz al final del túnel...
ResponderEliminarbesos!!
Las luciérnagas amables siempre son un buen faro al que seguir, AMAPOLA bonita! así que con paciencia esos fantasmas desaparecerán y esa luz cálida volverá a estar dentro de ti aun perdida en le laberinto, que es donde estamos todos : )
ResponderEliminarUn beso grande...precioso el poema!
Seguro que tu paciencia terminará recibiendo el premio que mereces en forma de felicidad.
ResponderEliminarUn beso.
Atravesarás los muros y tendrás paz.
ResponderEliminarBesos.
Bello poema entre olas de mar y laberintos...
ResponderEliminarAbrazo
Bellísimo, Amapola!!! Realmente bello...
ResponderEliminarLeyendo estos se adivina el ritmo de tu mensaje. Y ese mensaje es amable.
Sigue esa senda oscura... y encontrarás la luz!!! Y mientras tanto comparte delicias como esta que nos has dejado.
Un enorme abrazo, querida amiga!!!
Ánimo Amapola! Seguro que pronto brillará esa estrella para ti.
ResponderEliminarAbrazos.
Te dejo un abrazo Bellísima.
ResponderEliminarTen paciencia y sigue siempre intentando, que todo es posible y tú podrás lograr todo lo que quieras.
ResponderEliminarBesos de anís.
Nadie nos enseña de qué manera calmar el mar de nuestros pensamientos, y es tan doloroso aprenderlo por cuenta propia...
ResponderEliminarSaludos,
J.
A propósito de la paciencia, y como canta Soda Stereo, esta "Tarda en llegar y al final, al final hay recompensa". La canción, "Zona de Promesas", por si te interesa.
ResponderEliminarMamá sabe bien que perdiste una batalla y que quieres regresar solo a besarla.
Me rindo altiro, por escrito no transmite lo mismo.
Va un abrazo, Amapola.
P.D: Por más que lo pienso, no se me ocurre cómo contarte que tengo un blog nuevo. Bueno, creo que ya lo hice. Y la razón es de lo más surreal.
Hola Amapola.
ResponderEliminarCuando accedas aquí, ¡mi abrazo!
Chao amiga.
Esa ola del mar en los pensamientos es la que seguramente apartará los fantasmas.
ResponderEliminarMuy buen poema.
Saludos.
La luz siempre llega !!! cariños
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