En la vida de toda persona existe un lado oscuro cuando no le da la luz del sol. Únicamente es que hay que abrir mucho los ojos para verlo bien. Bienvenidos a este blog.
domingo, 6 de julio de 2014
Relato, (III-IV)
salió de su escondite la ardilla
que vigilaba diariamente a Agustino,
vivía justo en la ramita más alta del árbol
en el cual estaba situada la casa
del duendecillo
pero tenía que acudir a su despensa
lejos de esa rama,
(...)
se encontró con Agustino
frente a frente,
(...)
no le dijo nada,
( estaba dormido ya)
saltó por encima de cuerpo
y se llevó una buena provisión de
frutos secos...
( continuará)
Agustino dormía feliz,
ni siquiera soñaba ya con su pecera
(...)
el sol asomaba por la ventana
y le daba en la cara
solamente le miraba ya
el pez...
Imágenes google , espero que os haya gustado el relato.
Besos.
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me ha encantado Amapola,
ResponderEliminaruffi, menos mal que su mami no le preparò sopa de pez...
Ahora viven felices Felipita, Agustino y pececito
en el àrbol.
Acabaràn peleàndose?
no creo porque no son personas...
Un beso y feliz domingo
querida Amapola,
me encantas
:*