equilibrio

Cuando no importas mucho
a tu entorno

hay algo bueno
y algo malo.

Me centraré en lo bueno,
si desapareces por cualquier
circunstancia

nadie te echará
de menos,

por lo cual pocos
problemas causará
tu propia desaparición

y ésa es una gran ventaja
pues dado el momento
de desaparecer
al saber que nadie te echará
de menos más o menos es un alivio
para tomar la decisión
de por ejemplo marcharte

a algún
otro sitio.

Y lo contrario, importar
a la gente hace que te pienses
más seriamente no desaparecer
de sus vidas,

sin embargo
al final la única vida que queda
y con quien se convive es la propia
vida interior,

si ésta es grata,
al menos te queda la esperanza
de seguir con ella
y no abogar
por la muerte como escapada,

escapada al dolor,
o a lo que sea
para lo cual no haya solución.


La vida te puede
aportar serenidad
o angustia, alegrías o tristezas,

en mi caso a veces no sé
que aportarle a la vida.

Sin embargo por ahora
quiero vivir.