Atraviesas mil mundos
de colores extraños,
en cada flor remota
se refleja el color
de un cielo cambiante
y en esos caminos
escarpados
entre brumas y precicipios
siempre hay algún oasis
como sombra
amable donde protejerse
del sol
un sol callado
y fuerte,
un sol
que contruye vida
a pesar de los veranos e
inviernos de cada estación.
Ahora está la tierra
algo triste
con la cercanía del verano
a pesar de las nieves derretidas,
y el canto alegre
de los gorriones acompañando
al cielo y al suelo
de cada jardín
donde las ventanas sonríen
sin lluvia a ese sol.
Olas de pensamientos
caen despacio
al paisaje,
cierro los ojos,
y apareces tú.
A la tierra también le da vidilla el sol veraniego.
ResponderEliminarBesos.
Qué bonito cerrar los ojos y que aparezca el dueño de nuestros sueños!!
ResponderEliminarBello poema, Amapola.
Besicos muchos.
El último verso es la guinda perfecta del poema.
ResponderEliminarBesos.
Hay recuerdos que nunca se iran.... Saludos amiga.
ResponderEliminarLindos aromas de energía en marcha. Sea en pasado o en presente
ResponderEliminarUn abrazo
Bonitos versos de un sol reconfortante,que llega a disipar sombras y a traer luz,alegría y pensamientos de la persona amada.
ResponderEliminarBesos Amapola.
Lindo paisaje veraniego...
ResponderEliminarAbrazo
La belleza del paisaje es remplazada por el pensamiento de alguien que fue algo bonito en la vida.
ResponderEliminarEl sol, el agua y la vida, los pájaros las flores, todo es belleza y fuerza para seguir caminando.
Besos