está un poco aburridilla de charlar con los peces de colores y almacenar tesoros gigantes en el fondo del mar.
Pero yo no quiero saber nada de ella,
y si la veo en una playa paradisiaca de esa en las que sueño, haré como si no la conociera de nada.
Bs.

Pobrecilla sirena.
ResponderEliminarNo tienes corazón.
Claro, seguramente has hablado con ella, y te ha contado sus penas.
ResponderEliminarBs.
....ains!!!!!!con lo que me gustan las sirenas..........
ResponderEliminarBesos.