todos los días

Todos los días
me mira- observa
mi gata,

con gran atención
desde su rincón-descanso

como si percibiera
todos y cada uno de mis sentimientos,

de desánimo, tristeza
alegría o desolación

entre descanso y descanso
de sus siestas,

y me soprende
asombrada mirándome
con sus grandes ojos verdes,

como si extrañamente
viera el fondo de mi alma,

y sólo es una gata un animal
al que no se le supone
alma, y evolutivamente
se le supone
un ser poco civilizado

esto me trastorna
un poco,

porque siento
que a veces los humanos,

los de mi especie, supuestamente
superior a la gata en la escala evolutiva,

se quedan en miradas
más superficiales.

Suponiendo que alguna vez,
alguien me mire
que ya,sería mucho pedir.


O habré dejado de ser humana ya,
¿ quién sabe?


Pero creo que sí lo soy
para bien o para mal

, quizás más bien para mal.